El gremio denuncia que las empresas buscan reducir sueldos sin demostrar una crisis real
La actividad pesquera en la región atraviesa un nuevo conflicto entre trabajadores y empresarios. El Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) denunció que el sector empresario intenta aplicar un recorte salarial del 30% a los marineros, justificando la medida en una supuesta crisis económica que, según el gremio, “nunca fue documentada”.
“No han demostrado que la actividad esté en crisis”
Juan Navarro, secretario de Pesca del SOMU, rechazó con firmeza la propuesta y advirtió que se trata de una maniobra para reducir los sueldos sin fundamentos reales. “Lo que pretenden es bajar los salarios, pero no han demostrado que la actividad esté en crisis”, declaró en El Quinto Poder.
Según Navarro, el 17 de marzo las empresas declararon un lockout patronal, evitando salir a pescar como forma de presión para imponer la reducción salarial. “Dicen que tienen crisis, pero nunca mostraron documentos que lo demuestren”, afirmó.
Desigualdad en la cadena de valor
El sindicalista reveló datos que exponen la disparidad entre los ingresos de los marineros y las ganancias empresariales. Actualmente, un marinero percibe 36 pesos por kilo de langostino capturado, mientras que el mismo producto se vende en las góndolas a precios que oscilan entre 18.000 y 20.000 pesos por kilo.
Navarro también comparó la situación con el conflicto salarial en Rawson, donde los trabajadores lograron un aumento del 100%. “Allí consiguieron mejoras, y acá lo que quieren es bajarnos el sueldo a lo que cobrábamos hace 20 años”, denunció.
Exportaciones y rentabilidad
El SOMU desmintió la versión de los empresarios sobre la caída del precio del langostino en el mercado internacional. Mientras que el sector pesquero sostiene que la tonelada se comercializa a un valor bajo, el gremio afirma que el precio real ronda los 5.000 dólares por tonelada. “Ellos dicen menos para justificar ajustes, pero sabemos que exportaron por 6.500 dólares la tonelada el año pasado”, aseguró Navarro.
Además, el gremialista subrayó que el langostino extraído no requiere reprocesamiento, ya que se exporta directamente como producto premium, lo que desmiente el argumento de crisis.
Diálogo sí, recorte no
Desde el gremio dejaron en claro que están abiertos al diálogo, pero sin aceptar recortes salariales. “Podemos hablar de alternativas, pero no de una rebaja salarial”, sentenció Navarro.
Para el SOMU, la actividad sigue generando grandes ingresos y ninguna empresa está en quiebra. “No hay ninguna empresa fundida. El sector sigue exportando y obteniendo grandes ingresos”, concluyó.