Un joven de 25 años fue víctima de un hurto en plena vía pública, en la intersección de Tucumán y Castelli, cuando un delincuente le robó su celular, un Motorola G82 5G de color celeste. Al contarle a su familia lo sucedido, su padre decidió tomar cartas en el asunto y logró, mediante una serie de llamadas, dar con el presunto autor del robo.
Lo que ocurrió después fue aún más insólito: el ladrón le exigió $100.000 a cambio de devolver el teléfono. El encuentro para concretar la entrega se pactó en Boulevard Marítimo al 2400.
El padre accedió al pedido, entregó el dinero exigido y, acto seguido, se presentó en la Subcomisaría Casino, donde denunció lo sucedido y aportó una detallada descripción física del imputado.
Personal policial de civil, que integraba el Gabinete Técnico Operativo de esa dependencia y realizaba tareas investigativas en la zona, logró interceptar al sospechoso a pocos metros del lugar pactado. El hombre fue aprehendido de inmediato. En su poder, los efectivos hallaron el dinero entregado por la víctima —cinco billetes de $20.000— y una serie de elementos de fabricación casera tipo “yuga”, comúnmente usados para forzar cerraduras.
El fiscal de Flagrancia, Dr. Eduardo Layus, ordenó la notificación de formación de causa y el inmediato traslado del imputado, quien ya cuenta con 18 procesos penales previos, a la Unidad Penal N° 44 de Batán.
La causa fue caratulada como extorsión en contexto de hurto.
