Gabriel Solano, diputado de la Ciudad de Buenos Aires por el Frente de Izquierda y dirigente del Partido Obrero, pasó por Sueños y Sonidos y no ahorró críticas contra la ministra de Seguridad Patricia Bullrich ni contra el gobierno de Javier Milei. En un tono que combinó indignación y análisis político, ratificó la denuncia presentada contra la funcionaria y advirtió sobre la desesperación del oficialismo en materia económica y represiva.
“La denuncia contra Bullrich tiene que ver con la reiterada violación de derechos democráticos”, sostuvo Solano. “No es la primera vez, pero ya pasó un límite. Lo que estamos viendo es un Estado que utiliza la extorsión, la intimidación pública y el incumplimiento de los deberes de funcionario para acallar la protesta. Lo de las estaciones de tren con mensajes amenazantes para quienes van a manifestarse es un ejemplo claro”.
La referencia es a las advertencias colocadas en pantallas y altoparlantes en terminales como Constitución y Retiro, donde el Ministerio de Seguridad advierte que los manifestantes serán identificados y reprimidos. Solano lo equiparó a un “derecho de admisión” arbitrario, como si asistir a una protesta justificara una prohibición para entrar a una cancha o cualquier otro espacio público. “Si robás un supermercado, no tenés derecho de admisión. Pero si defendés a los jubilados en una marcha, sí”, ironizó.
Pero la crítica de Solano no se detuvo en Bullrich. También cargó contra el Poder Judicial y el blindaje mediático que, según él, protege al gobierno: “Nos hablan de una justicia independiente, pero cuando Milei quiere meter un juez en la Corte por DNU, todos los que antes se rasgaban las vestiduras ahora callan”.
Jubilados al límite y un acuerdo con el FMI sin sustento
El diagnóstico de la crisis social fue lapidario. “La jubilación mínima es de 279 mil pesos y la canasta básica de un jubilado está en 1.2 millones. El 75% de los jubilados cobra la mínima. ¿Cómo se sostiene eso? Hoy las familias tienen que sostener a los jubilados y al mismo tiempo apenas llegan a fin de mes. Es desesperante y da mucha bronca”, expresó Solano.
El dirigente también se refirió al acuerdo con el FMI y lo vinculó con la incertidumbre económica: “El gobierno de Milei está desesperado. Se les cae la única carta que tenían, que era la baja de la inflación. Ya empezó a subir de nuevo, los precios de los alimentos están por las nubes, y el Fondo Monetario ya está pidiendo una devaluación. Y una devaluación es más inflación”.
Solano recordó la experiencia de Luis Caputo en 2018 y sugirió que la historia se repite: “Si ponés a Caputo, es para que haga la gran Caputo. No va a hacer otra cosa. Se dedican a jugar con la bicicleta financiera, pero cuando la rueda se frena, viene la estampida”.
Según el legislador, el gobierno no tiene margen: “Perdieron 4 mil millones de dólares en dos meses, y el FMI les ofrece 6 mil millones como ‘libre disponibilidad’. Es nada. Es como curar un cáncer con una aspirina”.
“El gobierno no llega a las elecciones”
Solano planteó un escenario crítico para Milei: “O devalúan antes o después de las elecciones, pero todo el mundo lo sabe. Por eso ya hay corrida contra el peso y desarme de posiciones financieras. Esto significa menos salarios, menos jubilaciones, menos consumo”.
En este contexto, el diputado del Frente de Izquierda insistió en la necesidad de una nueva gran movilización universitaria. “Las marchas del año pasado fueron útiles, pero no alcanzaron. Hay que volver a salir a la calle. La universidad, como los jubilados y los trabajadores, solo se defiende en la calle. Y el Congreso ya demostró que es una escribanía de Milei”.
Con el panorama cada vez más tenso, la pregunta que dejó flotando Solano fue inquietante: “Si hoy están en esta crisis, ¿qué va a pasar mañana? Porque los números no cierran, y cuando los números no cierran, la bronca empieza a cerrar por otro lado”.