El cierre repentino de la sucursal bahiense del mayorista Yaguar generó sorpresa y bronca entre empleados y gremios. La empresa bajó las persianas sin previo aviso y envió telegramas durante el fin de semana, confirmando que las indemnizaciones serán depositadas en los próximos días.
Según informó el secretario gremial de la Asociación de Empleados de Comercio, Alejandro Olea, “el domingo a las 10 de la mañana se comunicó personal de Recursos Humanos y Legales para avisar que la sucursal cerraba definitivamente”. Ni los clientes, ni siquiera los propios trabajadores, tenían conocimiento de la decisión.
Ventas en caída y problemas de acceso
La compañía argumentó dos motivos principales: la baja en las ventas y las complicaciones vinculadas a la obra inconclusa del Paso Urbano, que dificultó el acceso al local. Sin embargo, para los gremios el cierre abrupto resulta incomprensible.
“No entendemos por qué tan rápido y así tan abrupta fue la decisión. Ayer trabajaron normalmente y hoy ya no abrieron”, expresó Olea.
Más de 60 familias afectadas
El cierre impacta de manera directa en entre ocho y diez camioneros y unos cincuenta empleados de comercio, quienes quedan sin su ingreso de un día para el otro.
“Son familias que se quedan sin sustento. Vamos a pedir algo más que la indemnización mínima por ley, porque estos trabajadores sostuvieron la sucursal en los momentos más difíciles”, remarcó el dirigente.
Decisión unilateral y reclamo gremial
Desde el sindicato cuestionan que la empresa no haya abierto una instancia de diálogo previa.
“Les reprochamos no haberse sentado a discutir. Se podría haber buscado una solución para evitar este final”, señaló Olea.











