Mar del Plata y toda la región atraviesan una nueva crisis en la atención de la obra social IOMA. Desde la semana pasada, afiliados y prestadores denuncian cambios administrativos repentinos que dejaron a miles de pacientes sin servicio, con turnos cancelados y en un escenario de total incertidumbre.
La novedad fue confirmada por los propios centros asistenciales: ACEAPP dejará de ser la gerenciadora de las prestaciones, y en su lugar aparece el Grupo Rocia como co-gerenciador. La transición, lejos de estar ordenada, generó fuerte malestar en clínicas, policonsultorios y profesionales.
“Los prestadores sienten incertidumbre y desconfianza ante la nueva figura que viene a instalarse”, expresó en diálogo con Radio 10 Mar del Plata Adriana, referente de Afiliados Autoconvocados de IOMA en General Pueyrredon. Según explicó, la falta de definiciones y de pagos adecuados provocó que muchos servicios se suspendieran o se limitaran drásticamente.
Uno de los casos más graves es el del Hospital Privado de Comunidad (HPC), que dejó de atender consultorios y estudios programados a afiliados de IOMA, manteniendo únicamente prestaciones de alta complejidad derivadas por la obra social. “Los afiliados quedan sin servicio, con turnos cancelados, volviendo a peregrinar”, remarcó.
En medio del desconcierto, los policonsultorios continúan recibiendo pacientes, aunque —según denuncian— lo hacen “a pesar de la falta de pago de la maldita ACEAPP”.
Adriana también reveló el caso de una afiliada de Miramar que debía operarse de urgencia, pero cuya cirugía fue suspendida por falta de convenio entre el Sanatorio Belgrano y la nueva gerenciadora. “No sabemos cómo actuar ni qué hacer. Pedimos ayuda”, expresó con preocupación.
La situación, afirma, ya superó cualquier límite tolerable para quienes dependen de la obra social: “¿Hasta cuándo vamos a seguir mendigando nuestro derecho a la salud?”
El reclamo central de los afiliados apunta a reactivar el Centro Médico como institución intermedia entre IOMA, prestadores y pacientes. “Ellos son los médicos de Mar del Plata. A ellos les podemos pedir cuentas. A las gerenciadoras que vienen de afuera, no”, sostuvo Adriana.
Mientras continúan los cambios, la falta de información oficial y la suspensión de prestaciones, miles de afiliados se sienten desamparados. “No sabemos a quién recurrir ni a quién manifestar esta desesperación”, concluyó.
