Un joven de 22 años fue detenido este jueves en el barrio Las Heras tras una persecución policial que terminó con el secuestro de dos armas de fuego. El operativo se desprendió de la investigación de un robo bajo la modalidad de inhibidores, ocurrido el 21 de marzo en San Juan y Saavedra.
Todo comenzó cuando una mujer de 48 años dejó su auto estacionado en esa esquina para llevar a sus hijos al colegio. Al regresar, descubrió que le habían robado la cartera, donde tenía efectos personales y un iPhone 13.
La clave para avanzar en el caso fue el sistema de reconocimiento de patentes (LPR) municipal, que permitió localizar el vehículo sospechoso, un Ford Fiesta, en Ratery entre Guanahani y Hernandarias. Agentes del Comando de Patrullas, junto con efectivos de las comisarías 4ª y 16ª, llegaron al lugar y encontraron el auto estacionado. Cerca de allí estaban tres hombres.
Cuando intentaron identificarlos, uno de ellos salió corriendo y, en plena fuga, sacó un arma y apuntó contra los policías. La respuesta fue inmediata: el sospechoso quedó rodeado y, antes de ser reducido, descartó dos armas de fuego. Se trataba de un revólver calibre .22 con una munición y otro calibre .32.
El fiscal Fernando De la Canale, de la UFI de Flagrancia, ordenó que el joven de 22 años sea notificado por tenencia ilegal de arma de uso civil y trasladado a la Unidad Penal 44 de Batán. En tanto, el fiscal Fernando Berlingeri, de la UFI ODA, dispuso el secuestro del Ford Fiesta, pero no tomó medidas contra el conductor, un hombre de 33 años que quedó identificado.