Cristina Fernández de Kirchner, presidenta del Partido Justicialista y exmandataria, lanzó un mensaje explosivo en redes sociales apuntando al presidente Javier Milei y su vicepresidenta, Victoria Villarruel. El disparador fue la situación del senador entrerriano Edgardo Kueider, detenido en Paraguay con más de 200 mil dólares sin declarar.
Con su característico estilo irónico, Cristina arremetió:
“Che Milei, a vos que venías a terminar con la ‘casta’, los 33 senadores peronistas te piden sesión especial el jueves a las 11 para remover al senador argentino preso en la Triple Frontera. Fijate que tu vicepresidenta no se olvide de convocar y que tus seis senadores bajen al recinto para dar quórum. ¿O Kueider es tuyo y lo van a dejar seguir siendo senador porque tienen miedo que hable?”
Che Milei!
A vos que decías que venías a terminar con la “casta”, te quiero avisar que los 33 senadores y senadoras peronistas piden sesión especial el próximo jueves a las 11hs, para remover al Senador argentino que está preso en Paraguay porque lo agarraron en la Triple… pic.twitter.com/IgdO1NazTe
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) December 7, 2024
El mensaje resonó con fuerza en el marco de un escenario político cada vez más crispado. El caso Kueider no solo sacudió al peronismo, donde inició su carrera, sino también a La Libertad Avanza, espacio al que el legislador se acercó tras la asunción de Milei, siendo pieza clave en la aprobación de la polémica Ley Bases.
La pelea por la destitución
El viernes, el bloque de senadores de Unión por la Patria formalizó ante Villarruel una solicitud para convocar una sesión especial y tratar la remoción de Kueider, ahora imputado por contrabando en Paraguay. Según el kirchnerismo, su destitución abriría las puertas para que Stefanía Cora, referente de La Cámpora en Entre Ríos, asuma su banca. Esto acercaría al bloque peronista a los 37 senadores necesarios para alcanzar quórum propio.
Desde su detención, Kueider pidió licencia y se encuentra bajo prisión domiciliaria en Asunción. Su caso pone a Milei y Villarruel en una encrucijada política: respaldar su destitución y permitir que el peronismo gane terreno en el Senado, o protegerlo y enfrentar las críticas por no actuar contra lo que pregonaban erradicar: los privilegios de la “casta”.
Un Milei silente y un Senado en tensión
El escándalo no solo afecta la imagen del oficialismo, sino que pone en el centro de la escena las tensiones entre Milei y Villarruel. Cristina no desaprovechó la oportunidad de chicanear sobre las fracturas internas: la vicepresidenta, encargada de convocar sesiones en el Senado, deberá decidir si da lugar al pedido opositor o lo bloquea para proteger al senador acusado.
En un contexto donde Milei construyó su figura prometiendo combatir la corrupción, el caso Kueider podría convertirse en un termómetro de su coherencia política. ¿Se animará a desprenderse de un aliado reciente o priorizará mantener una débil mayoría legislativa?
Por ahora, el silencio del Presidente y su equipo frente al tema alimenta las especulaciones. La sesión especial del jueves promete ser un nuevo capítulo en esta novela política que expone los límites del discurso anti-“casta” frente a los desafíos del poder real.