Juan Carlos Galarregui (56) fue detenido en la terminal de la vecina localidad de Santa Clara del Mar, donde intentaba escapar a Buenos Aires. La policía lo identificó a pesar de que mostró un documento de otra persona durante el interrogatorio. Las marcas y tatuajes en su cuerpo fueron clave para su reconocimiento.
Galarregui, que era intensamente buscado como principal sospechoso del femicidio de Rocío Fernández, fue apresado este jueves a la madrugada. El fiscal Fernando Berlingeri, al ser informado de la detención, ordenó que el acusado fuera trasladado a Mar del Plata, donde deberá declarar ante los tribunales.
Según fuentes de LA CAPITAL, al momento de su detención, Galarregui se presentó como Guillermo Vicente, un hombre de características físicas similares. Esta confusión fue alimentada por la difusión de su fotografía en redes sociales, justo cuando se conoció la tragedia que envolvía a Fernández.
La historia de Rocío es desgarradora. Salió de su casa en Vernet y Güiraldes en la madrugada del sábado, y tras reunirse con un amigo, tomó un taxi hacia el Puerto. Desde entonces, su paradero se volvió un misterio, aunque logró enviar su ubicación a un conocido, advirtiendo que estaría en Grecia y Libertad. Tenía solo 27 años.
