El 29 de junio de 1935, un grupo de radicales disidentes fundó la Fuerza de Orientación Radical de la Joven Argentina (FORJA), con el objetivo de enfrentar el giro conservador del radicalismo tras el derrocamiento de Hipólito Yrigoyen. Durante la asamblea constituyente, se aprobó una declaración que sintetizaba la mirada crítica del grupo: “Somos una Argentina Colonial: queremos ser una Argentina Libre”.
Esta consigna expresaba el diagnóstico de una Nación dependiente de potencias extranjeras y una firme aspiración a conquistar una verdadera independencia política y económica. Entre los fundadores se encontraban figuras destacadas como Arturo Jauretche, Homero Manzi, Juan B. Fleitas, Luis Dellepiane, Darío Alessandro, Gabriel del Mazo y Raúl Scalabrini Ortiz, muchos de los cuales habían sido formados por los ideales de la Reforma Universitaria de 1918.
Desde sus inicios, FORJA denunció el silencio del radicalismo frente a los escándalos gubernamentales, el arribismo dentro de sus filas y la ineficacia de la oposición parlamentaria. Algunas de sus definiciones conservan plena vigencia. Entre ellas, la acusación a las autoridades de la UCR de “colaborar con las oligarquías económicas entregadas al capitalismo extranjero”, y su advertencia sobre la consolidación de una dictadura política en beneficio de intereses foráneos:
“Se ha impuesto a la República una tiranía económica, ejercida en beneficio propio por capitalistas extranjeros (…), y por la supresión de derechos individuales, se han echado las bases para establecer de inmediato una dictadura política que asegure y consolide aquella tiranía.”
En 1940, FORJA rompió formalmente con la Unión Cívica Radical y, en 1945, consideró cumplida su misión con la irrupción del peronismo. Desde entonces, se la reconoce como la primera experiencia de confluencia entre sectores radicales y peronistas.
A 90 años de su nacimiento, numerosas voces dentro del radicalismo reivindican la vigencia de su legado y continúan comprometidas con la construcción de una línea política nacional, centrada en los intereses de las mayorías populares, la soberanía política y una economía liberada de condicionamientos externos.
Desde el espacio Radicales con Axel, recordaron palabras del expresidente Raúl Alfonsín, quien supo advertir que “Kirchner es el último escollo para la derecha, que nos puede ganar si seguimos todos divididos como estamos”. Hoy, consideran que ese lugar lo ocupa el actual gobernador bonaerense Axel Kicillof, blanco de ataques verbales, intentos de desfinanciamiento y bloqueos por parte del gobierno nacional.
En ese sentido, destacan el llamado de Kicillof a no ceder ante las presiones:
“No aceptemos ser ni sometidos ni traidores”, una consigna que, para este grupo de militantes radicales, sigue marcando el camino frente al avance de políticas de ajuste.
El documento lleva la firma de Liliana Frías, Gabriel Felizia, Mario Rodríguez, Pablo Vázquez, Daniel Deserti, Vito Martinelli, Dolly Pennisi, José Luis Alza, Gustavo Fino, César Gómez, Cristina Palacios, Adriana González, Sebastián Cattaneo, entre otros.