Miles de personas marcharon este 24 de marzo por el centro de Mar del Plata bajo la consigna “La memoria no se apaga”. La movilización, de más de 17 cuadras, dejó en claro que el pueblo sigue comprometido con la lucha por los derechos humanos y no está dispuesto a aceptar retrocesos en materia de memoria, verdad y justicia.
Desde temprano, organizaciones de derechos humanos, movimientos sociales, gremios, centros de estudiantes y ciudadanos autoconvocados se concentraron en Luro y San Luis para dar inicio a la movilización. A medida que la columna avanzaba por Buenos Aires, Colón e Independencia, los cantos y banderas expresaban un fuerte rechazo a las políticas del gobierno de Javier Milei, cuyo discurso negacionista encendió aún más la indignación popular.
“Este gobierno pretende borrar la historia, pero lo que hacemos hoy es demostrar que la memoria sigue viva”, expresó Andrés, un docente universitario que participó de la marcha. A su lado, Laura, una joven que marchaba con una foto de su tío desaparecido, agregó: “Nuestros 30.000 no son un número, son compañeros con nombres y sueños truncados. Y nuestra lucha es por los que faltan y por los que vienen”.
El acto central tuvo lugar en el punto de partida, donde referentes de organismos de derechos humanos leyeron un documento denunciando el vaciamiento de políticas de memoria, el ajuste feroz y la criminalización de la protesta social. También hubo un espacio para la música y la poesía, con artistas locales que llevaron su arte como una forma de resistencia.
El Concejo Deliberante no estuvo ajeno a la jornada: en una sesión especial, los concejales afines a Guillermo Montenegro y La Libertad Avanza abandonaron el recinto cuando se leía el documento oficial. Una postal que refleja la postura de un sector que prefiere dar la espalda a la historia antes que enfrentar su responsabilidad política.