Fue el primer acuerdo pleno con condena efectiva desde la implementación del nuevo Código Procesal Penal Federal en la ciudad. Uno de los acusados recibió 4 años y medio de prisión y el otro 3 años en suspenso. También se dispuso el decomiso de dinero, vehículos y herramientas utilizadas en el cultivo.
El caso se resolvió en apenas cinco meses. Dos hombres fueron condenados por cultivar, almacenar y tener con fines de comercialización más de 100 kilos de cogollos de marihuana y 530 plantas en un campo del paraje Colonia Barragán, partido de Mar Chiquita.
Uno de ellos recibió una pena de 4 años y 6 meses de prisión efectiva, mientras que el otro, por su participación secundaria, fue sentenciado a 3 años de ejecución condicional. Además, deberán pagar multas por 10.400.000 pesos, y se ordenó el decomiso de todo el material y vehículos secuestrados.
Según informaron fuentes judiciales, se trata del primer acuerdo pleno con condena efectiva desde la puesta en marcha del Código Procesal Penal Federal (CPPF) en el Distrito Mar del Plata.
Un operativo que comenzó por una denuncia insólita
La investigación se inició en mayo, cuando un grupo de jóvenes denunció que había sido amenazado a escopetazos mientras buscaba leña en un campo de la zona. A partir de esa causa, un juez provincial ordenó un allanamiento y el personal de la Estación Camet de la Policía Bonaerense descubrió una plantación de gran escala.
En dos galpones y una construcción anexa se encontraron:
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530 plantas de cannabis sativa bajo iluminación artificial,
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97,45 kilos de cogollos distribuidos en 43 bolsas de consorcio,
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20 kilos adicionales en cajas plásticas,
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17,5 kilos de ramas en proceso de secado,
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Blísteres con semillas, un arma, un perro Pitbull y equipos de ventilación y reflectores,
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Casi 11,5 millones de pesos y 400 dólares en efectivo.
Roles diferenciados y una logística profesional
El fiscal federal Santiago Eyherabide, a cargo de la Oficina de Narcocriminalidad, señaló que el emprendimiento tenía un “alto grado de inversión y sofisticación”, con predios bien acondicionados para el cultivo intensivo y almacenamiento.
Uno de los condenados había firmado el contrato de alquiler del campo, comprado materiales para las instalaciones y registrado compras a su nombre, por lo que fue considerado responsable principal. El segundo, en cambio, cumplía tareas de asistencia sin rol organizativo, lo que derivó en una pena condicional.
Vehículos decomisados y dinero destinado a multas
La sentencia dispuso que los 10.400.000 pesos secuestrados se utilicen para pagar las multas impuestas. También se decomisaron tres motos y una camioneta utilitaria, además de equipamientos que serán destinados a instituciones públicas.
